En el Reino Unido, la organización Four Day Week va a poner en marcha un ensayo en el que las horas de los trabajadores se reducen en un 20%, pero siguen cobrando su salario íntegro.
Charlotte Lockhart, fundadora de la organización, afirma: “Hay pruebas claras en todo el mundo de que si se reduce el tiempo de trabajo, aumenta la productividad”. Setenta y tres empresas han optado por probarlo.
Las semanas laborales más cortas están relacionadas con la mejora de la salud, el bienestar y el sueño de los trabajadores. A su vez, esto beneficia a las empresas con un aumento de la productividad.
Aun así, la semana laboral de cuatro días puede no ser una solución única para todos los sectores.