Algo que caracterizaba a Emilio Azcárraga Milmo (1930-1997), era su arrojo, destreza y precisión sobre lo que quería en los negocios. No tenía filtro y hacía temblar a cuanto empleado se le acercara, los hacía sentir frágiles y temerosos de provocarle un disgusto, que bien podría valerles una humillación, si no es que el puesto mismo.
Pero a la vez, también podía tener increíbles reacciones de gran humanismo y empatía, pudiendo un empleado, sin más, escalar de puesto u obtener una jugosa recompensa por una chispa creativa o una atinada respuesta. Así de impredecible era “El Tigre”, como era conocido Emilio Azcárraga Milmo.
Una de las más exitosas personalidades de aquella época fue Verónica Castro, quien realizó telenovelas de reconocimiento internacional como “Los Ricos También Lloran” y “Rosa Salvaje”, así como el programa de variedades “Noche a Noche”. Sin embargo, la “chaparrita más consentida de México”, habló sobre su paso por Televisa en aquellos años, y de su relación con Emilio Azcárraga, de quien dijo en una charla con la periodista Pati Chapoy, se sintió como su “payasita”: “Le caía yo bien con sus amigos, era como su juguetito de la tele, esa es la verdad, era su payasita de la tele”, aseguró.
Vero Castro explicó que a El Tigre le gustaba mucho cómo actuaba y la quería mantener dentro de las filas de Televisa, pues ayudaba mucho su imagen con las ganancias en la empresa. Solía llamarla a su oficina para que le hablara a sus amigos como Rosa Salvaje, por lo que se convirtió en una persona que entretenía a las amistades del que fuera su jefe.
Sin embargo, Azcárraga le habría hecho saber que no sabía “cobrar bien” por su trabajo, esto luego de intentar darle un contrato de exclusividad por 20 años que no se llevó a cabo ya que su hijo lo sustituyó y los acuerdos fueron anulados.
“Me dijo que era p*nd*j* porque yo no sabía cobrar. (…) antes de morir, (me dijo) en diciembre: ‘Yo no te voy a pedir nunca nada. Te tengo respetada, pero quiero tenerte en la pantalla siempre y lo único que quiero es que me acompañes todos los años a la comida de los publicistas’. En esa última comida me dice: ‘Se te acabó tu contrato’, y le dije: ‘Sí, ya sé, ¿ya no me va a dar contrato?’. ‘¿Y (Me dice) tú quieres seguir trabajando conmigo?, ¿o ya no quieres seguir trabajando?’, y le digo: ‘Pues yo sí, si usted me va a dar chamba, sí”, recordó la actriz.
Para 1996 la tensión aumentó, la actriz se fue a Argentina a realizar una telenovela que tuvo un gran éxito, algo que no le gustó al Tigre quien la castigó y vetó por un año de Televisa. Historia por la que sospecha que fue el real motivo de que no se le diera el contrato por 20 años más.