El rechazo de los líderes republicanos del condado de Nassau es la denuncia más dura del partido del Sr. Santos, cuyos líderes en Washington han permanecido en silencio.

Los dirigentes republicanos de Long Island, entre ellos el representante Anthony D’Esposito, pidieron la dimisión del representante George Santos, que se enfrenta a múltiples investigaciones sobre sus finanzas, gastos de campaña e invenciones en la campaña electoral.

El Sr. D’Esposito, que representa a un distrito situado justo al sur del Sr. Santos, dijo en una conferencia de prensa que su colega republicano había violado la confianza “no sólo de los votantes, sino de la gente de toda América”.