La esperanza no es sólo pensar que “todo irá bien”. “La esperanza es la creencia de que tu futuro puede ser mejor y más brillante que tu pasado y de que realmente tienes un papel que desempeñar para mejorarlo”, según Casey Guinn y Chan Hellman, autores de “Hope Rising”.
Si la esperanza fuera una ecuación, sería algo así: esperanza = objetivos + hoja de ruta + fuerza de voluntad. La esperanza es más un músculo que una emoción; se puede enseñar y aprender, y las personas con más habilidades para la esperanza rinden mejor en la escuela, el deporte y el trabajo.