Investigadores del MIT y de la Escuela de Medicina de Harvard descubrieron que la mente es “especialmente fértil” durante el inicio del sueño, la etapa más temprana del sueño en la que una persona fluctúa entre estar dormida y despierta.
“Encontramos un fuerte efecto del ‘inicio del sueño’ en la creatividad”, dijo Kathleen Esfahany, autora del estudio y estudiante del MIT. “Cuando se te incita a soñar con un tema durante el inicio del sueño, puedes tener experiencias oníricas que luego puedes utilizar para estas tareas creativas”.
Los científicos encontraron que esta incitación, conocida como “incubación de sueños dirigida”, generó historias más creativas en las personas que durmieron la siesta con una indicación específica que en aquellas que durmieron sin una indicación específica o en personas que se mantuvieron despiertas.
Los nuevos hallazgos sugieren que el cerebro establece conexiones más amplias entre conceptos dispares durante este estado de sueño, lo que puede potenciar la creatividad.