La Taquería Garibaldi, una conocida cadena de restaurantes con ubicaciones en Sacramento y Roseville, en el norte de California, se ha visto envuelta en un escándalo que ha llevado a una sentencia judicial desfavorable. El tribunal federal ha dictaminado debe pagar la suma de $140,000 a 35 de sus empleados debido a un incidente alarmante.

En una investigación llevada a cabo por el Departamento del Trabajo, se descubrió que los propietarios de Taquería Garibaldi habían contratado a un presunto sacerdote para espiar a los trabajadores. Este acto violatorio de la privacidad y la confianza de los empleados generó una clara violación de los derechos laborales.

Además de esta acusación, se descubrió que los propietarios también habían incumplido con el pago de alrededor de $70,000 en salarios atrasados a los empleados.

El juez designado en el caso dictaminó que los propietarios son los obligados a pagar la suma de $140,000.