En un raro encuentro con una figura empresarial estadounidense, Xi Jinping, líder de China, se reunió con Bill Gates mientras funcionarios de Washington se disponían a llegar a Pekín en un esfuerzo por reanudar las conversaciones bilaterales.
Xi dijo a Gates que era “el primer amigo estadounidense que he recibido en Pekín este año”, según el Diario del Pueblo, el periódico del Partido Comunista. Xi dijo también que quería estrechar lazos con la organización filantrópica de Gates, la Fundación Bill y Melinda Gates, para ayudar a los países en desarrollo.