Nunca antes vimos a un artista del género regional con tantas aptitudes deportivas; si bien algunos han sorprendido con sus dotes como futbolistas y beisbolistas, todos ellos se quedaron en “ligas menores” pues cambiaron los uniformes de equipo y el sudor en los campos por la adrenalina del escenario, pero una de las cosas que más está gozando este chico que es el “fenómeno” del momento, es de las oportunidades que está recibiendo. 

Distintos cantantes han sido invitados a lanzar “primeras bolas”, cantar en los medios tiempos, o hasta “echarse cascaritas” pero Peso Pluma no tiene competencia, nadie ha recibido más jerseys, nadie tiene más fotografías con estrellas deportivas ni mucho menos ha lucido al mostrarse como comentarista o posible “star en la NBA”.

Todo esto ha sido producto del furor que representa, y tanto en las filas del box, como del balompié, NFL, las luchas y el básquetbol, hay seguidores VIP del intérprete de “Rosa Pastel”. Pero de los diferentes protagonistas con los que se ha topado hay quienes tienen un mayor sitio también entre los corazones de las aficiones mexicanas, hasta el momento quizás con quien más había sorprendido era con “El Chicharito” Hernández, pero señoras y señores ha llegado uno de los más destacados peloteros que ha dado México, y es que la historia moderna de los Dodgers de Los Ángeles no podría entenderse sin Julio Urías. 

Una noche verdaderamente inolvidable se vivió en el estadio del equipo Angelino, pues quien tuvo el honor de lanzar la primera bola en la ceremonia previa al cierre de la serie con los Piratas de Pittsburgh fue el cantante tapatío, quien desde que salió al campo para dirigirse al diamante enloqueció a los asistentes que aplaudieron y gritaron su nombre, y es que el pitcher que tenía por encargo atrapar la bola era nada más y nada menos que el sinaloense Julio César Urías.  

Por supuesto todo esto quedará para los “archivos” por los videos y fotografías que se tomaron, pero uno de los momentos más lindos fue la interacción entre el par de “idolazos” que hicieron una videollamada con Shelby Miller, otro lanzador del equipo que está lesionado pero que es súper fanático del “chico tumbado” y quiso saludarlo. 

Las redes sociales de los Dodgers se llenaron de comentarios y repost sobre esta visita en donde vimos al millennial cercano a la gente, sobre todo a los niños… ¡un homerun más para este joven intérprete!