Según un estudio de la clínica de rehabilitación Harly Street, liderado por la especialista en adicciones Mandy Saligaril, darle un celular a un niño es exponerlo a una adicción como el alcohol o las drogas.
“Cuando le das a tu hijo una tableta o un teléfono, realmente le estás dando una botella de vino o una bolsa de cocaína”, afirmó.
Estas adicciones se ven reflejadas negativamente en la salud física u mental de los menores. Dolores en el cuello, la mala postura, la ansiedad y los trastornos del sueño son algunos de los males que causan estos dispositivos.
Además, un celular expone a los niños a otros peligros, como la pornografía o el sexting, el cual puede afectar el sano desarrollo de sus emociones.
“Muchas de mis clientes son niñas de 13 y 14 años de edad que se ven involucradas con el sexting, y lo describen como “completamente normal”, dijo Saligari.