Este otoño, cuando vayas a ponerte la vacuna de refuerzo Covid-19 recién actualizada, tal vez debas elegir con cuidado el brazo en el que se administra.

Según un estudio publicado en la revista eBioMedicine, la respuesta inmunitaria puede ser mayor si la dosis de refuerzo se administra en el mismo brazo donde se aplicó la última inyección de Covid-19.

Los investigadores utilizaron los datos de 303 personas que recibieron la vacuna de ARNm, así como una inyección de refuerzo como parte de la campaña de vacunación de Alemania.

Según el estudio, dos semanas después del refuerzo, el número de “células T asesinas” era significativamente mayor en quienes habían recibido ambas vacunas en el mismo brazo.

Según Laura Ziegler, coautora del estudio, estas células, que atacan y destruyen a otras células a las que se dirigen, estaban presentes en el 67% de los casos en el mismo brazo y sólo en el 43% de las personas que recibieron las inyecciones en brazos diferentes.