En el crecimiento del trabajo manual, Biden tiene mucho que celebrar. En julio, el gasto en construcción de los fabricantes aumentó un 71% respecto al año anterior, según datos del Departamento de Comercio, y los fabricantes tenían 106,000 empleados más en agosto respecto al año anterior, a pesar de que las encuestas empresariales muestran un debilitamiento de la demanda de los consumidores.
Desde que asumió el cargo en 2021, Biden ha promulgado una serie de importantes paquetes de gasto para canalizar miles de millones de dólares hacia la industria manufacturera, incluida una ley bipartidista de infraestructuras y la Ley CHIPS y de Ciencia. Eso ha permitido a los fabricantes comenzar a planificar nuevas fábricas para aumentar la producción, según datos del gobierno.
La inyección de fondos federales y el actual giro del país hacia las energías renovables han contribuido a desencadenar el inicio del llamado “boom manufacturero” en Estados Unidos, según algunos economistas, entre los que destaca el Premio Nobel de Economía Paul Krugman. Los analistas de Goldman Sachs estimaron recientemente que la industria manufacturera estadounidense podría crear 250,000 puestos de trabajo en dos años.