Con una trayectoria de casi cinco décadas, Marco Antonio Solís, El Buki, cerró con gran éxito su gira “El MÁS Querido” en Estados Unidos, la noche del sábado 26 de octubre en el American Airlines Arena de Miami, su última parada.

“Gracias por estar siempre aquí”, le dijo el cantante mexicano al local con entradas agotadas mientras iniciaba su espectáculo con botas y pantalones blancos, y una chaqueta con incrustaciones y la palabra MAS, en la espalda.

Además de sus fieles seguidores, Solís estuvo acompañado por cuatro hermosas bailarinas y una enérgica banda de 16 miembros que incluía a dos pianistas y dos bateristas. El show de Solís en Miami originalmente iba a tener lugar el 31 de agosto, pero fue pospuesto debido al huracán Dorian.

A sus 59 años, Solís sigue siendo el gran showman que era cuando comenzó su carrera en los años 70. Su voz y letra aún dan a los fanáticos una sensación de nostalgia.

A mitad del espectáculo, Solís invitó al escenario a sus hijas Marla y Alison Solís. Las talentosas jóvenes, que son mitad cubanas y mitad mexicanas, hicieron alarde del innegable talento que obtuvieron de su padre al interpretar la táctica de empoderamiento femenino de Jenni Rivera: “Basta Ya”.

Luego, las chicas se sentaron con su padre para presentar su nueva versión renovada de “¿Dónde Estará Mi Primavera?”, una canción que Solís dijo, que es una de sus favoritas y la más representativa de su carrera.

Cerca del final del concierto, Solís dedicó una ovación de pie de un minuto a su buen amigo, José José. “Tomó su último aliento en esta ciudad, donde vivió durante 23 años”, dijo antes de interpretar su propia versión de “La Nave del Olvido”.