Recientemente se conoció que el gobierno de Trump propuso nuevos aranceles sobre unos 2,400 millones de dólares en productos franceses, como una amenaza por el llamado “impuesto digital” que, según el mandatario, discrimina a los productos estadounidenses.
“El impuesto a los servicios digitales de Francia es irrazonable o discriminatorio, y grava o restringe el comercio de EE.UU.”, dice un documento de la Oficina del Representante Comercial de EE.UU.
Entre los bienes que se verán sancionados se encuentran los vinos, quesos, bolsos de mano y varios productos de maquillaje.
Por su parte, el ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire, manifestó su descontento contra esta represalia contra su nación.
“Las últimas amenazas arancelarias de EE.UU. no es lo que uno esperaría de un aliado”, expresó.