Debido al Coronavirus, el mundo entero está en alerta, ya que este virus, que ataca las vías respiratorias, ha causado varias muertes y la cifra va en aumento.
Pero este caso es distinto. En el Hospital de Niños Oishei, en Buffalo, Estados Unidos, un niño de 11 años murió de influenza, aunque había sido vacunado contra esta enfermedad.
El niño presentó gripe durante muchos días, pero como no mostraba mejoría, su madre lo llevó al hospital y allí fue diagnosticado con shock séptico, hasta que sufrió un paro y los doctores no pudieron hacer nada más para salvarle la vida.
“Quiero que sea recordado por el niño maravilloso que era, y no sólo por otra muerte relacionada con la gripe. Fue vacunado e hicimos todo lo posible para prevenirlo y ayudarlo”, dijo la madre del menor a ABC News.
Según los especialistas, la cepa de la influenza A ocurre a principios de año y la de influenza B ocurre entre marzo y abril, pero casos de esta llegaron antes de tiempo.
Es preocupante que un niño que tenía la vacuna, no pudo bloquear las diversas cepas de influenza, enfermedad que causa la gripe afecta a los pulmones, la nariz y la garganta. Los más vulnerables son los niños y adultos mayores.