Existen matrimonios peculiares, pero este es un caso bastante insólito.

En el municipio de Pueblo Viejo, al norte de Veracruz, México, una mujer llama Irma Pérez decidió casarse con un árbol Chicozapote que había sembrado hace 40 años.

Doña Irma dijo que decidió casarse con el árbol como una muestra de amor a la naturaleza y que busca concientizar del cuidado del medio ambiente, que cada vez está más contaminado.

La Sra. Irma organizó una gran fiesta para la boda, contrajo nupcias en la Congregación Hidalgo de Pueblo Viejo.

A la ceremonia asistieron muchas personas y la fiesta fue igual que cualquier otra boda, como los votos, el beso para unir sus vidas y hasta el baile del vals de los novios e invitados.