Dos de los mejores doctores y asesores de la Casa Blanca, dieron una perspectiva sombría de como el coronavirus podría afectar al país, aun con medidas agresivas para frenar la propagación, podrían morir hasta 200,000 estadounidenses durante la crisis.

Cuando se le mostraron los datos, el presidente los leyó de inmediato y sacudió la cabeza diciendo, creo que tenemos que hacerlo” dijo el Dr.Anthony S. Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, explicando la reacción del presidente Trump.

Anteriormente, el presidente había mostrado su intención de abrir las fronteras para semana santa  y que todo volviera a la normalidad.

El Dr.Fauci explicó que la tasa de incremento de casos en Nueva York, Nueva Orleans y posiblemente Detroit, registran un momento de urgencia. “Discutimos fuertemente con el presidente sobre la situación”.

En esta discusión, también estaba la Dra. Deborah L.Birx, la cual había dicho a los periodistas el día domingo que, incluso con precauciones y restricciones, el modelo del gobierno estimó que: “entre 80,000 y 160,000, incluso 200,000 personas, podrían morir” debido a las consecuencias del coronavirus en los Estados Unidos.

Agregó que si no se toman medidas de precaución, los modelos proyectan que se podrían presentar entre 1,6 y 2,2 millones de estadounidenses que podrían fallecer a causa del virus.

“Algunos de ellos predijeron que la mitad de los Estados Unidos se infectará”, dijo.

La Dra. Birx reconoció que era un gran sacrificio para los estadounidenses quedarse en casa un mes más, pero dijo que las medidas tenían “potencial para salvar cientos de miles de vidas estadounidenses”.