Las tiendas de armas en Los Ángeles podrán abrir después de varios días de ida y vuelta sobre si son o nó un servicio esencial.
California está sujeta a una orden de resguardo en el hogar en todo el estado, lo que significa que solo los servicios esenciales pueden permanecer abiertos. La orden también se aplica a Los Ángeles, la ciudad más grande del estado.
El problema es que no todos están de acuerdo sobre lo que se considera un servicio esencial.
Cómo se desarrolló la polémica: el martes 24 de marzo, el sheriff del condado de Los Ángeles, Alex Villanueva, dijo que las tiendas de armas habían sido declaradas un negocio no esencial y se habían visto obligadas a cerrar. Villanueva dijo que estaba agregando 1,300 oficiales para ayudar a hacer cumplir los cierres.
Al día siguiente, retiró su orden.
Más adelante en la semana, Villanueva reiteró que las tiendas de armas y municiones no son negocios esenciales y deben cerrar, lo que limita algunos días el destino de las tiendas en el condado.
Luego, el viernes, la Asociación Nacional del Rifle y otros grupos de propietarios de armas presentaron una demanda contra el gobernador de California Gavin Newsom y otros funcionarios estatales y del condado.
Ahora, Villanueva ha retrocedido nuevamente, diciendo que las tiendas de armas ya no estarán cerradas.
“El Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles no ordenará ni recomendará el cierre de negocios que venden o reparan armas de fuego o municiones”, dijo Villanueva en un comunicado.
“Independientemente de si una empresa vende comestibles, gasolina, armas de fuego o cualquier otro producto o servicio, los alentamos a cumplir con todas las medidas de salud y seguridad vigentes”.
