Actualmente es común escuchar que si se quiere bajar de peso, se debe de eliminar por completo el consumo de carbohidratos, ya que estos son los encargados de hacernos engordar.
Nuestras células requieren de energía para poder cumplir sus funciones y dicha energía solo se puedo obtener mediante los alimentos.
La principal función de los carbohidratos es proveer energía para que podamos funcionar óptimamente durante el día. Estos se pueden clasificar en dos tipos: los simples y los complejos.
Los simples son aquellos que nos brindan energía rápidamente como el azúcar, las golosinas, los postres, entre otros. Los complejos por su parte, son aquellos que son ricos en fibra por lo que su proceso de absorción es más lento. Fuentes de carbohidratos complejos son: vegetales, cereales enteros, avena, entre otros.
Los expertos manifiestan que todo está en el equilibrio, si se elimina por completo algún nutriente de la dieta, tarde o temprano se sufrirán deficiencias nutricionales que pueden tener graves consecuencias para la salud.