Los funcionarios están luchando por acelerar un nuevo sistema para enviar cheques de estímulo de coronavirus a millones de estadounidenses, lo que genera temores de que fallas técnicas y una mala gestión podrían socavar una pieza central del esfuerzo de recuperación económica de la administración Trump.

La ley de $ 2 trillones firmada por el presidente la semana pasada exige que los pagos se hagan “lo más rápido posible”, ya que el gobierno de los Estados Unidos busca poner el efectivo que tanto se necesita en manos de las personas que están sin trabajo, luchando por pagar sus cuentas o que necesitan desesperadamente alimentos y otros suministros en medio del brote mortal.

Pero la capacidad del Departamento del Tesoro para cumplir con ese mandato del Congreso depende de la capacidad de sus sistemas actuales. En cuestión de días, los funcionarios federales deben crear un sitio web para que las personas ingresen su información bancaria, reforzando su seguridad para que los maleantes no puedan robar datos financieros confidenciales, y prepararse para ser bombardeados por  preguntas de los estadounidenses sobre cómo obtener el dinero.