El alcalde del condado, Carlos Giménez, convocó a un equipo de expertos en salud para determinar un conjunto de condiciones que deben cumplirse para aliviar restricciones para que los parques sean abiertos.

“Es importante que la gente salga a tomar el sol y a hacer ejercicio”, dijo Gimenez.

Gimenez advirtió que no planea reabrir las actividades al aire libre hasta que existan las condiciones adecuadas según las recomendaciones de los expertos médicos. Cualquier flexibilización de las normas haría hincapié en el distanciamiento social, al tiempo que se tendría una tolerancia cero con las violaciones de las normas.

Giménez dijo que el condado ha gastado casi 11 millones de dólares para prestar servicios durante el brote. Estimó que las pérdidas de ingresos podrían alcanzar los 170 millones de dólares.

Miami-Dade será sede de un ayuntamiento virtual la próxima semana, donde los residentes podrán opinar sobre la reapertura del condado.