Un hombre que había sido acusado de asesinato, evadió su captura por más de 12 años fingiendo que había perdido su capacidad para hablar, según informaron medios locales.
El hombre de apellido Zheng, proveniente de China, era señalado de haber asesinado al tío de su esposa después de una discusión por un alquiler de 76 dólares. Al parecer el hombre huyó de la casa, adoptó un nuevo nombre y empezó a vivir como un mendigo mudo para poder pasar desapercibido y ganarse la vida.
Después se estableció en otra ciudad donde consiguió trabajo en el área de la construcción, mientras mantenía el perfil de personaje mudo. De hecho, logró conseguir una nueva esposa con la que tuvo un hijo, pero nunca pronunció una palabra por temor a que se revelara su secreto.
Desafortunadamente, la policía realizó una encuesta a los habitantes de la ciudad donde vivía para llevar un registro y para su desgracia, al no tener documentos, los policías sospecharon de su identidad por lo que sometieron a pruebas de ADN y descubrieron su verdadera identidad.
Cuando decidieron interrogarlo, notaron que el hombre no podía hablar, pues al mantener durante tanto tiempo a sus cuerdas vocales sin uso, se “oxidaron” y se volvieron inútiles.