Por primera vez desde que los funcionarios estadounidenses comenzaron a implementar cierres generalizados para frenar la propagación del coronavirus, los 50 estados ya han reabierto parcialmente.

Connecticut se convirtió en el último estado en comenzar a levantar las restricciones, permitiendo ahora que las tiendas y restaurantes reabran sus puertas.

Algunos estados, incluyendo Georgia y Texas, han puesto en marcha planes de reapertura agresivos. Otros han adoptado un enfoque más mesurado; por ejemplo, Nueva York, California y Pensilvania sólo están reabriendo partes de sus estados que reportan disminuciones en nuevos casos.

Muchas ciudades también siguen teniendo órdenes de permanecer en casa. En Baltimore, las reuniones de más de 10 personas siguen estando prohibidas y las tiendas minoristas permanecen cerradas.

Los expertos advierten que el peligro no ha terminado: Los funcionarios de salud dicen que los estadounidenses siguen corriendo el riesgo de contraer el virus altamente transmisible y a veces mortal.

“Lo único que mantenía controlado este virus tan contagioso era que cada uno de nosotros mantuviese esa distancia física”, dijo la Dra. Leana Wen, ex comisionada de salud de la ciudad de Baltimore.

Los expertos han advertido que levantar las restricciones prematuramente puede significar que miles de estadounidenses más morirán y podría causar un segundo pico de casos en algunas partes del país.

La responsabilidad ahora recae en los individuos para adherirse a las directrices, practicar el distanciamiento social seguro y adaptarse a nuevos hábitos para mantenerse a sí mismos y a los que les rodean seguros.