Las relaciones de pareja tienen altibajos y eso es algo normal. No importa si son novios o un matrimonio, pueden vivir momento en los que parece que la separación es la única salida.

Justamente son esos momentos los que definen el compromiso que tienen como pareja, pero cuando aún hay amor y es posible una separación ¿Qué se hace?

El principal consejo para evitar una separación es que exista una amplia y sincera comunicación, ya que a veces se van acumulando los desacuerdos, las dudas y se va formando un concepto del otro que no siempre es real. Por esto, no se puede permitir que las cosas lleguen al límite, porque eso causa que explotemos sin razón.

Cuando hay amor, no deseas hacerle daño a la otra persona, ya que a pesar del distanciamiento es con esa persona que quieres estar, aunque las muestras de cariño se hayan extinguido.

Cuando llegan los hijos la vida en pareja cambia, pero los hijos son el complemento para repartir amor y no para sustituir el amor de pareja.

En esos momentos de cambio se hace necesario hablar de los sentimientos, darse tiempo para compartir solo los dos y hacer cosas en pareja.

Cuando se está en pareja también se debe respetar el espacio de cada uno.

Para que una relación funcione hay que saber ponerse en el lugar del otro, escuchar, aceptar opiniones, llegar a acuerdos sobre las obligaciones, y, aunque en algún momento haya peleas, éstas deben terminar en buenos términos para evitar acumular rencores.

El amor es un sentimiento que trasciende y si llega a transformarse, cuando deciden separarse, se debe haber pensado en el bienestar de los hijos y la paz mental de los dos, pero estas acciones son las mismas que al hablarlas pueden prevenir una ruptura y volver a los inicios de enamoramiento.