Restaurantes, gimnasios y otros negocios tendrán que cerrar esta semana en el condado de Miami-Dade de Florida, ya que los casos de coronavirus siguen aumentando en todo el estado, anunció hoy el alcalde Carlos Giménez.
“Continúo reduciendo las aperturas de negocios mientras continuamos viendo un pico en el porcentaje de pruebas positivas de COVID-19 y un aumento en las hospitalizaciones”, dijo en una declaración en el sitio web del condado.
A partir del miércoles, estos negocios deben cerrar, según el alcalde:
- Restaurantes (excepto los servicios de comida para llevar y de entrega a domicilio)
- Salones de baile
- Instalaciones para banquetes
- Lugares de fiesta
- Gimnasios y centros de fitness
- Alquileres a corto plazo
Giménez dijo que las actividades al aire libre – incluyendo las piscinas de los condominios y los hoteles – pueden permanecer abiertas con un estricto distanciamiento social. Los campamentos de verano y las guarderías también pueden permanecer abiertas con ciertos límites de capacidad.
Los edificios de oficinas, tiendas y salones también pueden permanecer abiertos.
Las playas volverán a abrirse mañana, “pero si vemos que hay hacinamiento y que la gente no sigue las normas de salud pública, me veré obligado a cerrar las playas de nuevo”, dijo.