Israel ha vuelto a imponer una serie de limitaciones estrictas, cerrando salas de eventos, clubes, bares y más, a medida que los casos de coronavirus aumentan en todo el país.
El gobierno también anunció que los gimnasios y piscinas públicas se cerrarán una vez más, así como los lugares culturales. Las casas de culto se limitarán a 19 personas, y los restaurantes se limitarán a 20 personas en un área cerrada, o a 30 personas en un área abierta con suficiente distancia entre las mesas.
El jueves, Israel superó los 1,000 nuevos casos en un día, alcanzando una cifra récord diaria de 1,140 nuevas infecciones. Durante la última semana, Israel ha registrado un promedio de aproximadamente 800 nuevos casos al día, lo que representa un aumento de casi 40 veces desde mediados de mayo, cuando el país tenía aproximadamente 20 nuevos casos al día y parecía tener el virus bien controlado.
“La pandemia se está extendiendo – es tan clara como el sol. Está aumentando bruscamente cada día y arrastra -en contra de lo que se nos ha dicho- casos graves a su paso”, dijo el primer ministro Benjamin Netanyahu en una reunión de gabinete.
Continuó: “Hoy en día, hay alrededor de 90 casos graves y el número se duplica cada cuatro días. Si no actuamos ahora, tendremos cientos, y quizás más de 1,000, casos graves en las próximas semanas, que paralizarán nuestros sistemas. Por lo tanto, debemos tomar medidas inmediatas que nos eviten tener que tomar medidas aún más extremas más adelante”.
